¿Qué es un SDDC?
Introducción
Un Software Defined Data Center (SDDC) extiende conceptos de virtualización como abstracción, agrupación y automatización a todos los recursos y servicios del centro de datos para lograr IT as a Service (ITaaS). Así pues, todos los elementos de la infraestructura (la red, el almacenamiento, el procesamiento y la seguridad) se virtualizan y se entregan como un servicio.
Uno de los mejores puntos que ofrece un SDDC es que se puede realizar operar y gestionar mediante una API. Así pues, para poder lograr esto, se necesitan los siguientes componentes (entre otros):
- Computer Virtualization: es decir, virtualización de un ordenador, encargado del procesamiento de los datos.
- Software Defined Network (SDN): es decir, virtualización de red. Engloba el proceso de fusionar los recursos del hardware y el software para conseguir una red virtual basada en software.
- Software Defined Storage (SDS): es decir, virtualización de almacenamiento para potenciar el rendimiento y la durabilidad.
- Software de atomatización y gestión: se usa principalmente para ayudar al administrador del sistema a gestionar todos los componentes del Data Center.
Ventajas
Entre los beneficios de los centros de datos definidos por software se encuentran:
- Mayor eficiencia: al extender la virtualización en todo el centro de datos, se aprovechan mejor los recursos de éste.
- Mayor agilidad: capacidad para poder instalar, desinstalar o gestionar aplicaciones rápidamente.
- Facilidad de gestión: al ser un sistema definido por software, la gestión de sus componentes es totalmente centralizada, de forma que su control, gestión y supervisión se hace mucho más sencillo. Además, los conocimientos técnicos necesarios para su gestión suelen ser menores, al no necesitar conocer todos los protocolos y lenguajes específicos de cada dispositivo y fabricante.
- Precio: un SDDC supone un menor precio a las empresas porque el hardware del cual se precisa es mucho más económico que el de un DC tradicional.
- Flexibilidad: la virtualización le brinda una gran flexibilidad a la hora de ejecutar aplicaciones en múltiples plataformas y nubes.
- Energía: se podría reducir el uso de energía de una empresa al permitir que los servidores y otro hardware del centro de datos funcionen con niveles de energía más reducidos.
- Seguridad: a diferencia de la infraestructura de los centros de datos tradicionales, los SDDC permiten que toda la información relevante para la seguridad esté vinculada a las propias máquinas virtuales. Así pues, se minimizan los fallos de seguridad provocados por errores humanos a la hora de configurar los dispositivos.
- Fiabilidad: los SDDC ofrecen mucha seguridad, ya que su arquitectura les permite compensar rápidamente los fallos de hardware. Para ello, las cargas de trabajo correspondientes se transfieren a otros componentes en un tiempo muy corto, sin que sea necesario el acceso manual a los dispositivos defectuosos o caídos.
Solución de VMWare
VMWare es una de las empresas que vende software para SDDC. En su caso, ellos se basan en una arquitectura de 3 capas, organizada de la siguiente forma:
- Capa física: los servidores, discos duros y los equipos de red.
- Capa virtual: el software que abstrae cada uno de estos recursos y lo entrega como un servicio (ITaaS). Incluye las máquinas virtuales (o los contenedores en Docker). Además, incluye VSAN para almacenamiento definido por software (SDS) así como también NSX para la función de red definida por software (SDN). También puede incluir otros servicios de seguridad como AppDefense.
- Capa de administración: esta es la capa que une las dos capas anteriores donde se pueden encontrar herramientas de gestión como vRealize Orchestrator y/o herramientas de automatización como vRealize Automation o vCenter, las cuales hacen posible ejecutar el centro de datos desde una interfaz centralizada.
Conclusión
Actualmente, pocas compañías se pueden permitir el lujo de migrar su arquitectura hacia una arquitectura SDDC, debido a la complejidad, riesgo y coste que supone realizar una migración de tal calibre. Así pues, esta arquitectura, aunque propone unas ideas muy interesantes, crece a un ritmo menos acelerado de lo que podría hacerlo.
No obstante, tendencias como la computación en la nube, DevOps y la popularización de los contenedores de Docker podrían acelerar este crecimiento, al ser conceptos muy relacionados con este.
Autores
Joan Farràs
Ferran Montoliu