25 Enero 2018

Jordi Mansilla, profesor de la escuela de Arquitectura de La Salle, participa en la reforma de la fachada del COAC

Jordi Mansilla, profesor de arquitectura de La Salle - URL, junto con los arquitectos Josep Fuses, Joan M. Viader, Jorge Perea, han formado parte de la restauración de la fachada del Colegio de Arquitectos de Cataluña (COAC), un edificio que desde el principio supuso la entrada de la arquitectura moderna en el corazón antiguo de Barcelona.

Lunes 22 de enero de 2018 se inauguró la fachada del COAC en la sede de la Plaza Nueva de Barcelona. Una remodelación de las ocho plantas del edificio de oficinas del Colegio de Arquitectos que ha tardado cuatro años de reforma.

La construcción data de 1962 y, además de renovar su aspecto se ha mejorado el aislamiento térmico y acústico y se ha hecho más sostenible a partir de energías renovables. Esta renovación es una acción que mira hacia el futuro de la arquitectura del siglos XXI.

Se proyecta con un mapping que enfatiza las mejoras técnicas y se convierte en un nuevo paradigma energético: "Renovamos la ciudad, construimos el futuro".

 

Jordi Mansilla es arquitecto y profesor de diseño arquitectónico a diferentes universidades desde el año 2002, incluyendo ETSAB, ETSALS y del IAAC. Es profesor visitante del MS in Architecure en la Universidad de Syracuse y profesor invitado en la M.S Architecture and Urban design en la Columbia University. Profesor del Programa de Estudio en el extranjero en la Universidad de Clemson y la Universidad de A & M de Texas en la BAC. Ha organizado diferentes talleres y seminarios, en Brasil, Suiza y Cataluña. En el año 2014 formó parte del concurso Plaza de las Glòries de Barcelona y en 2015 fundó el estudio MIRLA con Laia Maestro basándose en el firme deseo de promover el paisaje como vector para el cambio metropolitano. Ha colaborado en diferentes proyectos internacionales, trabajando en Londres, París y Yokohama, Japón.

 

Uno de los puntos más importantes de la COAC es el contraste de la base monumental del edificio (abierta y adornada con unos frisos diseñados por Pablo Picasso) y el volumen de vidrio de las oficinas. La nueva fachada mejora el aislamiento térmico y acústico de la anterior e incluye placas fotovoltaicas para generar energía para consumo propio. La reforma ha costado 1,8 millones de euros.

El decano del COAC, Lluís Comerón define la obra como "un caso piloto de rehabilitación energética". Los autores de la restauración comenzaron a trabajar desde el respeto absoluto al edificio. La obra original debía tener la máxima presencia y la intervención de los arquitectos debía ser reversible.

El COAC también aprovechó la ocasión para extender a las ciudades la mirada respetuosa y crítica de los arquitectos que han restaurado la fachada de su sede. Y es que el futuro responsable de las ciudades será más bien mejorar lo que ya existe que no construir de nuevo.

Jordi Mansilla, professor de La Salle - URL