¿La evolución natural de un técnico es llegar a ser Project Manager?

En este post quiero compartir con vosotros una reflexión que me asaltó hace unas semanas. En una de las asignaturas de Project Management que se imparten en Grado me encontré con un alumno que al finalizar su presentación final de proyecto delante de un cliente simulado me dijo:
Maria, no me quiero dedicar a gestionar proyectos, yo no sirvo para esto.
Yo le expliqué que es importante conocer las técnicas de gestión y aplicarlas para conseguir que el resultado técnico sea favorable, pero después de la conversación le estuve dando vueltas al comentario.
Me di cuenta que yo tenía la idea preconcebida que la evolución profesional de un técnico es llegar a ser Project Manager. Pero evidentemente las tareas a realizar son diferentes, así que no tiene porqué ser la evolucionar natural del técnico. Esto nos lleva a las siguientes reflexiones:
¿Se puede ser Project Manager sin haber sido técnico?
¿Si soy un buen técnico, seré un buen Project Manager?
¿Ser Project Manager, está alineado con mi carrera profesional?
Para intentar analizarlo me planteé evaluar los pros y contras de cada perfil:
Un PM que ha sido técnico
- Pros
- Al conocer la temática podrá hacer buenas estimaciones temporales de las tareas, así que no dependerá tanto del equipo técnico para las planificaciones.
- Entenderá los problemas técnicos, esto le llevará a tener más empatía con el equipo. El equipo se sentirá más comprendido.
- Tendrá más autoridad delante del equipo técnico.
- Da seguridad al cliente porqué puede argumentar los diferentes incidentes del proyecto des del punto de vista técnico.
- Contras
- Puede ser demasiado influyente con conocimiento técnico y convertirse en un solucionador.
- No desvincularse lo suficiente de la parte técnica le puede llevar a descuidar la parte de gestión.
Un PM que no ha sido técnico
- Pros
- Al no tener el conocimiento técnico dedica todo su tiempo a la gestión del proyecto y su mejora.
- Es más objetivo en las valoraciones de trabajo y sus alternativas.
- Con el cliente no se perderá en los detalles técnicos y será más objetivo con las deviaciones que puedan surgir y su análisis.
- Contras
- Depende completamente del equipo técnico a la hora de hacer las estimaciones de trabajo.
- Menos empatía con el equipo técnico para entender los problemas técnicos con los que se encuentran.
- Probablemente el equipo técnico lo vea meramente como un ente burocrático.
- De cara al cliente no podrá dar las explicaciones técnicas al detalle, necesitará un líder técnico.
De ahí se vislumbra que en el equipo del proyecto deben existir dos aspectos: un liderazgo técnico junto con un liderazgo de gestión.
La cuestión que nos aborda llegados a este punto sería si estos dos aspectos deben convivir en la misma persona o no. La opinión aquí seguro que se diversifica en función de las experiencias de cada uno. No creo que exista una solución única, sino que deberá adaptarse en función del proyecto, del equipo técnico y de los recursos disponibles en cada caso.
Respecto a las preguntas iniciales, parece que la evolución natural de un técnico es ser Team Leader no Project Manager, así que ser un buen técnico no tiene nada que ver con ser un buen Project Manager o no, pero sí que tiene números de ser un buen Team Leader. Por otro lado podríamos decir que no hay que tener un background concreto para ser Project Manager pero sí que ese background le da unos colores al Project Manager que pueden ayudar al encaje con el equipo técnico.
Personalmente, la experiencia que he vivido gestionando proyectos me lleva a pensar que es mejor separar los dos aspectos: Team Leader y Project Manager. Aunque también soy de la opinión que el Project Manager debe haber pasado por la parte técnica, en el momento en que desempeña las tareas de gestión debe desvincularse de la parte técnica. Otro punto que también creo que es muy importante es el tándem que deben formar estas dos figuras, es crucial para el buen desarrollo del proyecto.