Día 2: Llega el equipo a Urubamba
El viernes 13 de julio fue el día de salida de todo el equipo para buscar nuestro destino final: Urubamba. Pero el periplo fue diferente para cada uno de los grupos del equipo.
Por un lado, teníamos a Josep Solà, Carles Giol, Lola Treserras, Emiliano Labrador, Mari Romero, Verónica Riera y Guim Villa que salían desde el aeropuerto de Barcelona rumbo a Lima. 13 horas de viaje para llegar a la capital peruna sobre las 11:00 p.m. del viernes.
Por otro lado, el segundo grupo formado por Laia Seijas, Alba Llauró, Pablo Mongay, Jordi Mouriño, Rafa Zaragoza y Quim Porte volaban también a Lima pero con escala en Toronto. Así que llegaron a Lima un poco más tarde, sobre las 12:00 p.m o lo que es lo mismo a medianoche entre el viernes 13 y el sábado 14.
Finalmente, quedábamos en Lima ya desde un día antes Marta Miret, David Badia y Xavi Canaleta, que nos presentamos en el aeropuerto sobre las 2:00 a.m. del sábado, unificando todo el equipo para emprender vuelo hacia Cusco.
Así que sobre las 5:30 a.m. aterrizamos en Cusco, donde nos esperaban los Hermanos Manuel Marin, José Luís Vadillo y Cosme Zambrano para ayudarnos en nuestro desplazamiento hasta Urubamba. Una gran suerte disponer de dos vehículos para poder transportar todo el material. De todos modos, como éramos 16 y no cabíamos en los dos coches ranchera, 7 de nosotros junto con el Hno. José Luís tuvimos que viajar a Urubamba en combi.
Finalmente todos llegamos a La Salle Urubamba. Deberían ser sobre las 8:30 a.m. y nos esperaba un fantástico desayuno en la Comunidad de Hermanos de La Salle Urubamba.
El sábado estuvimos el resto del día preparando las diferentes actividades que se iniciaban el lunes. Debido a un pequeño problema con los horarios (como dice mi amigo Sisco, una planificación no aguanta un minuto de realidad), tuvimos que reestructurar todas las actividades de la setmana previstas en las comunidades. Eso sí, no perdimos la oportunidad de degustar los excelentes platos de Urubamba.