¿Por qué las aptitudes y las emociones son importantes para un emprendedor?

¿Qué aptitudes son importantes para emprender?

• La organización. Para que no se te olvide ninguna de las tareas sea administrativa, comercial o personal.

•  La capacidad de trabajo. Un emprendedor tiene que ocuparse de vender, de comunicar, de gestionar, de hacer estrategia, atención al cliente, networking….

•  El  liderazgo. Para dirigir, para reorganizar, para tomar decisiones…

• Observación del mercado, de sus necesidades, de sus carencias, de sus oportunidades.

•  La capacidad de ser multitarea. Comercial, administrativo y operario en la misma persona.

• La inteligencia emocional. Para ser capaz de entender a sus empleados, sus proveedores, sus inversores y sus clientes.

•  La comunicación. Ser capaz de transmitir información clara y concisa a sus empleados, a sus proveedores, a sus inversores y a sus clientes.

• La flexibilidad. De adaptarse a las situación del mercado en cada momento y darle la respuesta que necesita. La flexibilidad es uno de los elementos más importantes para tener éxito en los negocios y en la vida en general. Y supone ser capaz de desprenderse de lo no indispensable.

• El aprendizaje continuo sobre el entorno y sus oportunidades.

• El perfeccionismo. Para hacer su trabajo cada día mejor y ser muy meticuloso en los detalles.

• Investigación. Sobre el producto o servicio y diferenciarse de la competencia.

• El sentido común. Para tomar decisiones razonables y aceptables.

¿Qué emociones son importantes para emprender?

• La alegría: de levantarse todos los días y luchar por lo que a uno le gusta.

•  Disfrutar trabajando tal y como con cualquier otra actividad lúdica.

• La seguridad de saber que haces lo que quieres.

• Pasión por saber y hacer todo lo que está relacionado con tu actividad.

• La felicidad que te proporciona tu trabajo y tu creación. La felicidad no es un estado total pero sí se refleja en sentir un equilibrio interno y en trasmitir en tu trabajo tus emociones positivas. El éxito de un emprendedor empieza en la obtención de su felicidad y en la capacidad de transmitirla al negocio.