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25 Julio 2016 | Publicado por Redacció Projecte Urubamba

Día 7: Machu Picchu y Huchuy Qosqo

Y llegamos al sábado, primer día de descanso del Proyecto Urubamba. Descanso en cuanto a proyecto pero nuestra actividad, aunque sea de ocio, siempre es trepidante. En esta ocasión el equipo se dividió en dos grupos: unos que fueron al Machu Picchu y otros que hicieron una ruta hasta Huchuy Qosqo.

blog1Así pues, 5 componentes del equipo, Bea, Isa, Xavi Martín, Mònica y Mari, se fueron de visita al Machu Picchu. Com quien os escribe no estuvo en la expedición poco podremos decir, pero poco hay que contar del espacio más visitado de todo el planeta. Una maravilla monumental histórica.

blog2El equipo, según nos comentaron, además de tener un tiempo espléndido, disfrutó de la visita, de algún incidente con una llama rebelde y de un paisaje espectacular.

blog3Como no, el tradicional sello de haber estado en el Machu Picchu en el pasaporte y, por si esto no fuera suficiente, los valientes decidieron bajar a pie hasta Aguas Calientes, disfrutando de un descenso espectacular pero también cansado.

Mientras, el resto de componentes (Guim, Emiliano y yo mismo) nos disponíamos a hacer una ruta organizada por el mejor guía explorador de estas tierras: el Hno. José Luís Vadillo.

Este año nos llevo a hacer la ruta Chinchero - Huchuy Qosqo - Limay, una ruta inca maravillosa y muy poco conocida donde la naturaleza y la cultura inca tienen un peso específico importante.

Salimos ya a 3.875 metros sobre el nivel del mar. Esto ya nos hacía que avanzáramos lentos (excepto José Luís claro). ¡Cómo se nota la altitud! El sendero inca avanza subiendo suave pero la altitud no perdona.

Pero caro, el Hno. José Luís, a sus 69 años a punto de cumplir los 70, no se conforma con ir por la ruta sino que avanzada un poco el camino propone: ¿Y si nos elevamos por esta pendiente para tener mejores vistas? Pues para arriba. Nosotros encantados, todo hay que decirlo.

El cambio merece la pena. Por el camino (bien, camino no porque no hay camino) que nos lleva cruzamos diferentes lagunas y podemos contemplar un paisaje único completamente solos.

Ya por encima de los 4.000 metros, descubrimos que el hermano no es humano. algunos dicen que es un espíritu bondadoso libre, otros que tiene parte de maligno por el camino que nos hace disfrutar y a la vez sufrir... yo me inclino por lo primero. Seguimos subiendo en vez de volver a la ruta y nos proponemos llegar a una cima que se ve a lo lejos.

El ichu nos llega a la cintura y dificulta más nuestro paso aun cuando estamos ya por encima los 4.300 metros. El sol quema en un día espléndido.

blog4Queda poco y un último esfuerzo nos permite llegar a la cima cansaditos que dirían por aquí. Paramos a observar los nevados (Verónica, Chicón, et.) que se elevan majestuosos sobre los 5.600 metros. Nos hidratamos y comemo algo y a recuperar la ruta que se ve a lo lejos.

Recuperamos la ruta inca y nos encontramos con las únicas personas que veremos en todo el recorrido. El hermano Vadillo pone el acelerador en el descenso suave y vamos 6.5 km/h que para estar a estas altitudes no es poco.

blog12Sendero espectacular que después de pocos quilómetros nos permite tener una vista privilegiada de Huchuy Qosqo desde las alturas. Llegamos al poblado inca. No impresiona tanto como Machu Picchu quizá pero un entorno impresionante con un valor adicional: ¡estamos solos! No hay nadie.

blog8Comemos el último alimento que nos queda y reponemos fuerzas. Estamos a 3.600 metros de altitud pero aún nos quedan 800 metros de descenso hasta Limay. Nosotros casi hemos apurado los 2 litros largos de agua que llevábamos y el hno. Vadillo apenas ha consumido su pequeño botellín de 500 cc. Increible.

Y la bajadita que nos queda hasta Limay es dura y espectacular. Nos castiga la parte de las piernas y rodillas que todavía sobrevivía y nos hace llegar a Limay después de recoorer unos 18 km con 800 metros de desnivel positivo y unos 1700 metros de desnivel negativo.

Una vez más José Luís te has superado. No sé que nos deparará el futuro pero si el próximo año podemos regresar, esperamos poder contar con tu compañía y experiencia y que nos hagas sudar, sufrir y disfrutar como esta vez. Os dejamos con una imagen desde la cima a 4.542 metros.

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