Abriendo paso a la mente creativa

Una mente creativa nunca descartará una posibilidad por muchas debilidades que tenga, para así hacer más amplios los horizontes. Una mente creativa siempre irá más allá de lo que ya existe, más allá de los patrones e ideas universales. Una mente creativa, es infinita, siempre podrá dar más ideas de las que se plasman en papel, dando la impresión de que hubiera hecho falta más tiempo. Una mente creativa, no se rinde, no se conforma con los primeros pasos (aunque en ocasiones acaban siendo la mejor opción). Las mentes creativas nunca estarán saciadas, siempre querrán más, hasta que el dueño diga basta.

El tener una mente creativa, es una opción, una posibilidad, un camino, nunca una incapacidad. No es un proceso fácil, sobre todo al principio, pero esta mente puede ir desarrollándose poco a poco, idea tras idea, proyecto tras proyecto... Y hablando de proyectos, hablemos de la evolución del proyecto para Casino Barcelona en este módulo de la creatividad.

El proyecto podía tomar tantas formas, tantas posibilidades, que en un principio me abrumaba. Gracias a los primeros pasos: arquetipos, mindmap, benchmarking y sketchings pudimos empezar a crear... crear teniendo en cuenta perfiles, la competencia, la organización y el diseño. Seguidamente el diseño del diagrama de la información y muchos más sketchings, terminaron por vislumbrar cual podría ser, de todos los que habían, un buen camino para el proyecto.

Es un camino complicado porque continuamente hemos tenido que pensar si el usuario entendería o no según qué caminos o relaciones. Ahora nos toca esperar y ver con qué nos encontramos en el próximo módulo durante los test con usuarios. Actuaran o pensarán como nosotros supusimos?

Personalmente, este era un módulo que deseaba hacer pero al mismo tiempo me asustaba. Siempre me he considerado analítica con brotes de creatividad, es decir, que en ocasiones la creatividad ha estado presente, y en otras no. Para mí la creatividad siempre ha sido algo incontrolable, que aparece cuando ella quiere... pero estaba equivocada. Mi mente analítica era tan fuerte que no dejaba aflorar a la creativa, y me voy a explicar. Cuando anteriormente venían ideas a mi cabeza, las analizaba como buena analítica que he sido siempre, y si flaqueaban por algún lugar y no encontraba una solución rápida, la desechaba, sin más, consideraba que si en un primer momento eran débiles no merecían la pena trabajarlas más. Y este ha sido mi principal error, desechar ideas, desechar ideas débiles pero con potencial. Ahora puedo decir que siempre he tenido creatividad, no solo a brotes, solo que a veces las buenas ideas pueden aparecer desde un principio disfrazadas de debilidad.

Con este módulo he aprendido a pensar y concebir a la creatividad como un proceso que cualquiera puede realizar, eso sí, siempre con una actitud optimista y sin desechar, nunca desechar ideas disfrazadas de debilidad...

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