Los 6 perfiles necesarios para tu Startup

Para tener éxito, es necesario encontrar la combinación adecuada de talentos que se complementen, como en un puzzle. No es necesario contratar un montón de gente brillante y emprendedora para crear un equipo exitoso. Gente con mucho ego o arrogante puede convertir vuestra oficina en un auténtico campo de batalla, lo que sería un auténtico asesinato para una empresa pequeña. En vez de llegar a esos extremos, hay que buscar el equilibrio al contratar nuevos empleados.
Las personalidades que tienes que reunir en tu startup para que tu negocio crezca y prospere serian lo siguientes:
1. El soñador
Toda startup necesita un soñador. Será una motivación a la hora de crear la empresa desde cero y una fuerza más que os ayudará a seguir adelante día tras día. El soñador inspira, emociona y guía la empresa desde una perspectiva que va más allá de las nubes.
Procura cultivar este aspecto entre tus empleados, compartiendo con ellos tus grandes ideas, por más imposibles que te puedan parecer, y anímalos a hacer lo mismo. Comunicarles repetidamente tu manera de ver las cosas les dará confianza para ayudarte a construir tu proyecto (o pensar en ángulos o visiones en las que tú no habías pensado).
2. El Manager
El Manager, gerente o director es el que tiene un sueño y lo hace posible. Tiene que ser pragmático, de confianza y tener iniciativa para convertir ideas en acciones plausibles. El carisma no es algo tan importante aquí, se trata de ser accesible, digno de confianza y con visión de futuro. Es el que define los roles, marca objetivos y se asegura que cada individuo del equipo está dando la talla.
3. El constructor
El constructor piensa como un arquitecto y actúa como un hombre de negocios. Tiene una comprensión clara de la visión de la empresa y sabe cómo crearla. El constructor sabe cuándo buscar consejos y cuándo tomar decisiones. Es intuitivo, brillante e inventivo.
4. El currante
El currante estará contento de adelantarse y hacer lo que sea necesario para que el motor de la empresa funcione. El currante es el que hace las cosas entre bambalinas, ya sea encargar muebles de oficinas, ayudar otros miembros del equipo, o seguir una de las sugerencias hechas un día en cualquier reunión. Con toda honestidad, la verdad es que la mayoría de gente que forme parte de una startup tendrá ese tipo de rasgos. No hace falta cuidar su ego, pero un poco de reconocimiento nunca va del todo mal.
5. El tacaño
Cualquier persona que haya formado parte de un equipo fundador, tendrá una cierta empatía hacia el bootstraping o autofinanciamiento. La financiación (si es que llega a tiempo) puede tener buen sabor, pero no podemos empezar a despilfarrar dinero, por más alegría que este nos provoque. La persona que ejerce de “tacaño” cuestiona cada adquisición y nunca se compromete a gastar en algo si antes considerar posibles alternativas. La personalidad del tacaño tiene unos rasgos que hablan por sí solos, y que implican una preocupación constante para la salud a largo plazo de la empresa.
6. El animador
Cuando hay mucho trabajo por hacer, es muy fácil aislarse; te pones los auriculares, apagas el chat y sintonizas tu lenguaje corporal para que indique “no molestar”. Está claro que eliminar distracciones es una estrategia vital para conseguir trabajar de una forma constante y significativa. Pero estas prisiones individuales de silencio que nos creamos, pueden dejar la moral de toda una compañía por los suelos y más cuando es la actitud constante. Así que no hay desestimar la importancia de crear una moral fuerte y una cierta cultura de la diversión. Esa persona que tiene la habilidad de crear conexiones entre los distintos miembros de un equipo, que es capaz de reírse de él mismo y de los otros, y que puede darle la vuelta a las cosas en el momento oportuno, será un ingrediente esencial para tener un equipo feliz.
Fuente: eureka-startups.com