El emprendimiento y sus tipos

En los últimos años se ha hablado intensamente, yo diría que hasta la extenuación,  y se seguirá hablando de las start-ups y los emprendedores, que vienen a ser aquellas personas que de la nada y con una idea en la que nadie creía, han sido capaces de crear su propia empresa y vivir de ello, algunos, por cierto, muy bien.

Tal ha sido el bombardeo que parece que emprender es sólo un concepto relacionado con las start-ups, cuando en la realidad no es así.  Hoy en día, a nuestro modo de ver y desde un punto de vista empresarial y también social, existen tres tipos de emprendimiento, que son:

• El emprendimiento natural o no forzado, que nace con aquellas personas cuyo perfil y expectativas profesionales son claramente emprendedoras, y que no se detienen en hacer realidad sus ideas y sus sueños, tengan más o menos éxito.
• El emprendimiento forzado, que hoy en día está en pleno apogeo, ya que nace de la necesidad de buscarse la vida como sea porque resulta que el trabajo ‘asalariado’ no existe.  Al menos en este país ya hay algunas voces que dicen que es más fácil tener una buena idea de negocio y ponerla en marcha, que encontrar trabajo. Así, muchos de los ‘parados’ después de una larga carrera profesional, si tienen la posibilidad y algunos medios económicos (sobre todo y gracias a los 45 días de indemnización por año trabajado, que ahora ya no), lanzan sus propias iniciativas, buscando un nuevo sustento de vida, y además, paradójicamente, haciendo aquello que siempre les ha gustado hacer. Que contrasentido, ¿verdad?

• Y por último, el Intraemprendimiento o Corporate Enterpreneurship,  que es el eterno olvidado, pero que es algo que siempre ha estado latente en todas empresas de una forma u otra, poco y mal aprovechado, y que no es otra cosa que emprender, pero dentro de tu propia empresa, y donde los  empleados adquieren mayor visibilidad. Este tipo de emprendedor comienza a tener un mayor protagonismo, especialmente, dentro de un entorno de Innovación Abierta,  que promueve la interacción y la involucración de los empleados en el proceso de Innovación de la empresa.

Es por ello, que dentro del ámbito académico, es cada vez más importante trabajar en la formación de los conceptos y experiencias que permitan a las personas y por ende a sus organizaciones avanzar y desarrollar sus capacidades internas de innovación y emprendimiento.

Víctor Espinosa

Empresario – Colaborador en Innova Institute

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