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31 Octubre 2013 | Publicado por Innova Institute

El origen de la innovación abierta

La capacidad innovadora de una empresa se basa fundamentalmente en la estrategia de negocio y política de futuro que tenga implantada, y por supuesto, de los medios tanto materiales y humanos como económicos, que se destinen. En muchas empresas, y es totalmente lícito, son los consultores o proveedores de cabecera quienes proponen claramente iniciativas de innovación, donde éstos buscarán claramente un protagonismo importante, o al menos intentarán posicionarse lo mejor posible para que así sea.

Surge en este punto la duda de que parte debería tener más dedicación a la innovación de la empresa ¿tu propio equipo de innovación o el equipo de Business Development & Business Solutions del proveedor? Bendita cuestión.

Una empresa con un equipo propio poco preparado y con pocas ansias de innovar, está claramente en peligro. Sin embargo, una empresa que no deje participar a sus proveedores principales en las iniciativas de innovación, también lo está, quizás no a corto plazo, pero si a medio/largo plazo. El dinamismo y los puntos de vista externos son vitales para la riqueza del proceso de innovación de una empresa.

La solución pasa por consolidar equipos de innovación internos (Business Innovation Team) bien formados, en base a la experiencia adquirida así como a la formación recibida en el ámbito de la gestión de proyectos de Innovación (grados, cursos, masters o programas internos  y/o externos), con el soporte claro y sólido de la Dirección, y que sepan practicar lo que hoy en día se ha denominado Innovación Abierta.

Innovar de forma abierta, no es otra cosa de dar entrada al proceso de innovación a diferentes agentes y figuras que en el caso de la innovación más tradicional no entraban, como pueden ser los propios empleados de la compañía, como pueden ser los proveedores habituales, o como puede ser desarrollar ideas y productos en alianza con otras empresas y con un objetivo común: sumar capacidades y esfuerzos, y obtener productos punteros con éxito en el mercado. Los departamentos de I+D pasan de ser aquel área de la empresa, opaca y desconocida, a formar parte de las piezas de un engranaje donde la gestión y transferencia del conocimiento es fundamental.

Es en este ámbito donde también entra la Universidad. En nuestro caso, BES LaSalle está absolutamente involucrada, no sólo en la formación de la gestión de la innovación,  sino también en el soporte en la gestación y acompañamiento de nuevas empresas tecnológicas, a través de nuestro parque de empresas  LaSalle Technova.

Es así como nace la Innovación Abierta, como una forma de innovar que permite obtener el máximo provecho de la combinación de las diferentes capacidades involucradas, y que permite alcanzar los mejores y más exitosos resultados

Víctor Espinosa

Empresario – Colaborador en Innova Institute

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