Blog del grupo de investigación GRITS. Redes de próxima generación para el Internet del futuro, Fog Computing e Internet de las cosas para implementar nuestros diseños personalizados en nubes híbridas ciberseguras, en sistemas de almacenamiento a gran escala y comunicaciones de larga distancia.

20 Enero 2014 | Publicado por Editorial Team GRITS

Hybrid Cloud: la nube "adaptable"

Si hace 3 años el boom en las empresas era el Cloud Computing, hoy en día lo está siendo la Nube Híbrida o Hybrid Cloud. Este nuevo modelo de nube, pretende imponerse obteniendo lo mejor de la nube privada y de la nube pública.

hybrid cloudEl Cloud Computing normalmente se presenta en tres tipos de servicios (SaaS, IaaS, PaaS) y se suele definir como un paradigma que permite ofrecer servicios de computación a través de la red, lo que, como es de esperar, conlleva ciertas ventajas y ciertos inconvenientes.       Algunas de las ventajas son:

  • Reducción de la inversión inicial.
  • Rápida implementación.
  • Gran escalabilidad.
  • Disponibilidad.
  • Eficiencia energética.

Algunos de los inconvenientes son:

  • Dependencia con los proveedores del servicio.
  • Dependencia de la salida a internet.
  • Dificultad de adaptación a soluciones concretas.
  • Posibles problemas de seguridad.

Respecto a los tipos de nube se suele hablar de 4 tipos. La nube pública suele estar gestionada por una empresa ajena y los recursos, aunque están virtualmente separados, se comparten con el resto de clientes. Este tipo de nube suele implicar un peor rendimiento pero una mayor simplicidad en cuanto a la facilidad de escalar la nube, la facilidad de contratarla y usarla. Por supuesto, también suele resultar el tipo de nube más económico. La nube privada suele estar operada por la propia organización que la usa, pero también se pueden contratar los servicios a un tercero. Del mismo modo, suele ser local pero también puede ser externa aunque dedicada. Como rasgos generales, suele ser más cara, más segura y más personalizable. Un tercer tipo de nube es la nube comunitaria, que se opera por un conjunto de organizaciones que tienen algo en común, como por ejemplo una serie de hospitales o de universidades. A raíz de estos conceptos, nace un cuarto que es el que atañe a esta entrada, la nube híbrida. La nube híbrida es la combinación de dos de los tipos de nubes mencionados anteriormente, aunque en general se entiende: Hybrid Cloud = Private Cloud + Public Cloud. Lo que se consigue con ello es obtener lo mejor de los dos tipos supliendo sus carencias. Existen razones diversas por las que puede interesar tener una nube híbrida. Los tres casos más típicos son los siguientes: Seguridad: En ocasiones existe información sensible que no puede estar bajo riesgo, como información bancaria o sanitaria. En estos casos interesará mantener esta información en la parte privada de la nueva nube para minimizar los riesgos posibles. Coste: Si la carga de la nube va a ser más o menos constante durante todo el año pero durante un periodo determinado va a haber un pico, no compensa tener potencia sobrante todo el tiempo para permitir los picos. Lo más lógico y lo que se consigue con la nube híbrida, es tener una parte privada fija para la carga habitual, y una parte pública que permita compensar los picos manteniendo el servicio vivo. Disponibilidad: Del mismo modo que con una CDN, se puede crear una nube híbrida privada - multipública. Las multipúblicas se pueden elegir de forma que estén cerca de los clientes para reducir así la latencia y maximizar el ancho de banda disponible. Por supuesto, también se pueden elegir por coste o disponibilidad. Pero esta división de recursos plantea un problema. Para que todo esto funcione y tenga sentido, hace falta tener tanto un dashboard común para gestionar todos los recursos de forma unificada, como un orquestador o scheduler que divida y reparta las tareas tanto a los recursos ya disponibles como a los que se puedan contratar en tiempo real. Estos schedulers suelen fijarse principalmente en el makespan (tiempo empleado para finalizar una tarea) y en el coste económico de emplear los recursos necesarios. Algunos schedulers existentes como HCOC tratan de establecer un compromiso entre ambos parámetros. Por supuesto, hace falta determinar gran cantidad de métricas si se quiere conseguir un orquestador lo más inteligente y eficiente posible en todos los aspectos. En definitiva, la nube híbrida proporciona una gran adaptabilidad ante diferentes situaciones y usos a la vez que trata de suplir las carencias de los demás tipos de nube.

Share

Comentarios

Una pregunta, estos sistemas sobre el papel están muy bien pero,¿cómo se plantea la cyber-seguridad entre los diferentes subsistemas?

Es decir, ¿existen nuevas propuestas de arquitecturas seguras que estén preparadas para estos escenarios o lo que ya existe funcionará a la perfección?

En mi opinión son necesarias nuevas funcionalidades de seguridad para mantener sobretodo la confidencialidad y la integridad de los datos, sobretodo en nubes públicas compartidas por múltiples usuarios, y en los procesos de migración de datos entre público y privado. Y sobre todo, estoy seguro que cada cloud lo hace a su manera, de forma que la interoperabilidad y migración entre clouds se hace cada vez más compleja.

Dentro del paradigma del Cloud Computing, se ve claramente la necesidad de trabajar con una mezcla de clouds (público + privado). Tal y como comentáis, la seguridad y la integridad de los datos será un punto clave a tener en cuenta en aplicaciones futuras.

Cabe resaltar también la importancia de la necesidad de protocolos de transporte eficientes que utilicen el máximo de ancho de banda para el traslado de un cloud a otro de grandes volúmenes de información.

Añadir nuevo comentario

CAPTCHA
Esta pregunta es para comprobar si usted es un visitante humano y prevenir envíos de spam automatizado.
4 + 0 =
Resuelva este simple problema matemático y escriba la solución; por ejemplo: Para 1+3, escriba 4.