Blockchain: la arquitectura del centro de datos del mañana
Tal y como hemos ido comentando a lo largo de los artículos publicados en este mismo blog, los centros de datos se han enfocado tradicionalmente en el almacenamiento de datos y la preparación para la recuperación ante desastres, pero no siempre satisfacen la demanda de flujo de datos multiusuario en tiempo real. En el mercado digital actual, el cual se encuentra en constante evolución, es una evidencia que cada vez hay más usuarios y más datos. Este crecimiento ejerce presión sobre dichos centros, forzándolos a facilitar transmisiones de datos más rápidas para un número cada vez mayor de usuarios de Internet en todo el mundo. Frente a la gran cantidad de datos, las operaciones de los CPDs están pasando del almacenamiento al análisis y procesamiento de datos en tiempo real en función de la demanda.
Hoy en día, las distintas empresas más punteras en el sector de la tecnología están recurriendo a blockchain: un sistema que actúa como un administrador de registros digitales, utilizando múltiples centros de datos reforzados en todo el mundo para verificar los cambios en los conjuntos de datos. Blockchain reforzará la necesidad de infraestructuras seguras basadas en redes de centros de datos, los cuales están obligados a adaptarse a las nuevas estrategias comerciales emergentes. De hecho, dicha tecnología se usa en muchas de las implementaciones actuales y, a menudo, ni siquiera es palpable. Algunos ejemplos de aplicaciones que incluyen blockchain son contratos inteligentes, finanzas descentralizadas (DeFi), aplicaciones descentralizadas (dApps) y monedas digitales del banco central (CBDC), pero hay muchas más y las posibilidades crecen y se expanden constantemente.
¿Dicho esto, cómo funciona exactamente blockchain en profundidad? Tal y como se apuntaba anteriormente, consiste en una tecnología moderna verdaderamente revolucionaria que crea un registro descentralizado de cada transacción o bloque en la cadena y que se envía a múltiples ubicaciones con redes de computación para crear un sistema de verificación. Blockchain no solo aumenta el acceso a datos “transparentes” en Internet, sino que también actúa como un agente activo dentro de la ciberseguridad del entorno donde se encuentre funcionando. La creación de bloques en la cadena puede requerir de muchos recursos, pero en el mundo de hoy, tanto la ciberseguridad como la integridad de la red son primordiales. La naturaleza descentralizada de dicha tecnología implica que a un pirata informático le resultaría extremadamente difícil manipular los datos a menos que controle más del 51% de toda la red, algo que es prácticamente imposible de realizar. Así pues, un cambio "falso" en un registro lo invalidará cuando se compare con los millones de otras copias almacenadas en otras partes del mundo. Este aspecto es el motivo por el cual muchas grandes empresas están financiando trabajos en aplicaciones de blockchain fuera del mercado de las criptomonedas. La clave para el éxito de dichos sistemas se basa en la conectividad, la energía y otros servicios relacionados seguros, confiables y consistentes que se ofrecen en la industria de los centros de datos del presente.
Las infraestructuras de red de los centros de datos deben ser también compatibles con el Internet de las cosas, las redes 5G y miles de millones de dispositivos nuevos, mientras continúan brindando la velocidad y la escala cada vez mayores necesarias para dicha interconexión. Estos están cambiando, no solo a nivel arquitectónico (estructura de red de nivel 3 frente a estructura de red de nivel 2 con niveles spine and leaf), sino también a nivel físico: cada vez hay más cableados multifibra que proporcionan conexiones de alta densidad. A medida que aumentan los requisitos de ancho de banda en los CPDs, la backbone de la red de estos se ha actualizado gradualmente de 10G a 40G, convirtiéndose las implementaciones de 100G en algo completamente habitual. Al usar 40G desglosados en 4 x 10G ahora (o 100G como 4 x 25G tal y como se comentaba), la arquitectura spine and leaf brindará una estructura de red económica y eficiente para la gestión de distribución de datos de gran tamaño. El uso del módulo mallado permite lograr una estructura spine and leaf completamente compatible con la red actual de 40G o 100G al tiempo que garantiza la transición sin problemas a las futuras capacidades de la red de 400G a medida que crece la demanda de los usuarios. Los centros de datos no solo deben evolucionar para satisfacer la demanda de un mayor tráfico y más dispositivos, sino que también deben priorizar el almacenamiento seguro de los datos confidenciales de los usuarios: al transformar su arquitectura y adoptar una estrategia de blockchain, pueden dar el siguiente paso hacia una sociedad completamente conectada.
De cara a la elaboración del proyecto que debemos efectuar en la asignatura de “Gestión y planificación de redes”, tendremos en cuenta la importancia de dicha transformación para la inclusión de la técnica blockchain y os mantendremos informados sobre nuestros avances en posteriores entradas. ¡Muchas gracias por vuestro tiempo empleado en leernos!
Arturo Moseguí y Enric Sasselli