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25 Febrero 2021 | Publicado por userDataCenter

Docker en los CPDs

En esta entrada se hablará de Docker y su uso en los CPDs. El objetivo es conocer por encima en qué consiste y qué ventajas nos brinda esta herramienta tan potente y una vez se conoce su función, intentar aplicarla para mejorar un entorno CPD. 

 

Primeramente, antes de relacionar el uso de Docker con los CPDs, se hará una breve introducción sobre qué es Docker y qué ventajas aporta. Docker es un proyecto de código abierto, es decir un modelo de software basado en la colaboración abierta, que automatiza el despliegue de aplicaciones dentro de los llamados contenedores de software. Ésto proporciona una capa más de abstracción y automatización de virtualización de aplicaciones en diversos sistemas operativos. Cabe destacar el aislamiento de recursos del kernel de Linux que realiza Docker, así como los “cgroups” o espacios de nombres para permitir la creación de contenedores independientes entre ellos para que sean ejecutados en una sola instancia de Linux y así evitar la sobrecarga de iniciar y mantener máquinas virtuales.

Arquitectura del funcionamento de Docker

Actualmente el uso de Docker en el desarrollo de aplicaciones es muy utilizado y en un futuro próximo se puede convertir en una herramienta básica para aquellos que diseñan aplicaciones. Por lo tanto la compatibilidad de Docker con otros dispositivos y la flexibilidad de usar contenedores será un requisito cada vez más importante.

 

Una vez se ha realizado una breve introducción sobre qué es Docker, lo que se tendría que ver es cómo puede ser útil Docker en un entorno de CPD.

 

Una gran ventaja de Docker es la optimización de recursos y el ahorro en hardware y energía que provoca. Esta es una de las razones de mayor peso para su uso en CDPs ya que la inversión en hardware y el coste de la energía de tener en funcionamiento un CPD pueden ser los mayores gastos de este. Otra gran razón es la flexibilidad que da a los clientes para desarrollar o trabajar con él. La posibilidad de tener dispositivos que se adapten a su funcionamiento permite con muchos menos recursos tener una mayor capacidad de adaptación a diferentes aplicaciones y trabajos que se hagan con Docker.

 

Un ejemplo de cómo esta tecnología es muy buena para los CPDs se puede ver en el acuerdo entre HPE y Docker. Este acuerdo se basaba en mejorar la compatibilidad y el uso de Docker en sus nuevos servidores. De esta manera, los nuevos servidores de la empresa saldrían al mercado con una gran ventaja respecto a sus competidores, el poder usar y gestionar Docker de una forma mucho más eficaz y óptima. Estos servidores cuentan con Docker Engine y Docker support que permiten a los clientes crear aplicaciones distribuidas compatibles con cualquier infraestructura. 

En conclusión, Docker es una herramienta muy potente que nos permite aprovechar mejor los recursos a base de utilizar contenedores independientes. Esto puede ser muy útil en un CPD a la hora de minimizar componentes físicos y así ahorrar tanto en espacio físico como en recursos de energía que serían necesarios para mantener más equipos. Viendo el uso actual de la Virtualización y el gran uso de máquinas virtuales en CPDs, esta nueva manera de virtualización creemos que puede ser el siguiente paso o la evolución de lo que usamos hasta ahora.

 

Publicado por Lluís Camino Pérez

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