Entrevista con Daria Tataj PhD, fundadora y CEO de Tataj Innovation

En la próxima Global Master Class MBA contaremos con la experta mundial, influencer y líder digital del World Economic Forum, Daria Tataj PhD. Daria cree que un pequeño grupo de ciudadanos comprometidos puede cambiar el mundo. De momento ya cuenta con 23.000 seguidores en Linkedin. Conócela más en esta entrevista.

Presentación

Mi nombre es Daria Tataj. Soy la fundadora y CEO de Tataj Innovation donde ofrecemos soluciones prácticas en como construir habilidades digitales para trabajar con equipos remotos o híbridos. También soy asesora de la Comisión Europea en el futuro de la innovación, además de ostentar otras posiciones incluyendo el último nombramiento en el EIT Manufacturing Board.

Afirmas que la tecnología es un bonito juguete pero que la innovación tiene que ver con las personas. ¿Qué rol van a jugar los seres humanos en este próximo gran cambio?

Sí, en la entrevista de Digital Future Society, un think tank del Mobile World Congress Barcelona, afirmé que la tecnología es una cosa bonita y que la innovación está más relacionada con la gente. A lo que me refería es que la tecnología no debería ser el objetivo final, sino que debería servir a la gente y colocar al ser humano en el centro del trabajo realizado por científicos e ingenieros.

Habitualmente oigo en Silicon Valley que la tecnología debería resolver todos nuestros problemas. Pero eso no es verdad. Esta red de problemas globales que afectan a cada uno de nosotros, por ejemplo, la polución o el cambio climático, desastres o virus, atraviesan fronteras y continentes.

La crisis actual es la oportunidad histórica para cambiar el sistema global actual. Pero todo esto requiere de decisiones estratégicas tanto en los gabinetes de dirección de las empresas como a nivel político, coordinadas a través de muchos gobiernos. Podemos diseñar mejores sistemas, no porque la tecnología que tenemos nos lo permita, sino porque tenemos líderes que saben como conectar soluciones en red con problemas en red.

¿Qué tipos de plataformas crees que necesitamos para impulsar soluciones colectivas para problemas complejos?

La plataforma económica sigue la lógica de una red en la que el “ganador lo consigue todo”. Solo hay que ver la valoración de los gigantes tecnológicos acumulada en un puñado de empresas. Por lo tanto, es común que controlen un sistema conectado, ya sea para interacciones sociales como Facebook, movilidad como Uber, o trabajo, con plataformas dinámicas de trabajo como en el caso de Glovo, una empresa española de entrega. Otro ejemplo de plataforma es, por ejemplo, Decidim, una plataforma de código abierto diseñada para conectar ciudadanos catalanes en la participación democrática para co-crear soluciones de ciudades. Esta plataforma ha sido descargada por docenas de ciudades en el mundo.

Estas plataformas abren las puertas para promocionar soluciones colectivas diferentes a problemas complejos. Permiten alcanzar consumidores a gran escala o usuarios a tiempo real. Lo que es importante es mirar cómo son tratados los usuarios de estas plataformas: son consumidores, o tienen el derecho de ser también co-creadores o co-diseñadores.

¿Qué tipo de cualidades crees que debería tener un líder digital para encajar en este tipo de ecosistema innovativo?

Este nuevo entorno digital requiere de nuevas habilidades de liderazgo digital. Dado que todas las organizaciones han optado por el trabajo remoto o híbrido, la gente y los equipos necesitan ajustarse al nuevo entorno laboral. Este ajuste va mucho más allá de dominar las herramientas digitales.

Las habilidades clave de un líder digital están incluidas en el marco de competencia que hemos desarrollado para un entorno laboral totalmente digital. Esto es la Network IQ y está basada en el concepto de la Network Intelligence (red de inteligencia). Network Intelligence es la capacidad de crear redes con un propósito. Cuando hablo de redes me refiero a relaciones con compañeros, colegas y colaboradores, así como el uso de redes digitales para expandir la influencia a través de ecosistemas digitales como, por ejemplo, las redes sociales.

Desde el inicio de la pandemia he trabajado con muchas organizaciones en España, el Reino Unido y los Países Bajos. Les hemos ayudado a fortalecer habilidades de liderazgo digitales para que los miembros de los equipos puedan crecer y desarrollarse en posiciones de liderazgo cuando sea necesario. Continuamos nuestro trabajo convirtiendo la Network IQ individual en una Network IQ y cuatro roles que hemos identificado que necesitan los líderes cuando trabajan en remoto o en equipos híbridos: estratega, conector, orquestador e influencer.

Si tuviera que explicar estas habilidades Network IQ en profundidad diría que en nuestra metodología, un estratega es una persona que tiene la capacidad de pensar en términos de sistemas complejos y construir redes adecuadas para el objetivo de un equipo. Un conector es una persona que está bien conectada a diferentes partes de una organización o de un ecosistema. Un orquestador es una persona que tiene capacidad de gestionar múltiples proyectos, generar sinergias y compartir recursos. Un influencer es una persona que está conectada a otros influencers o encargados.

Somos testigos de una dramática bajada de la productividad. De acuerdo al BCG, hay un 56% de pérdida de la productividad por lo que respecta a actividades colaborativas. El trabajo remoto permanecerá en la “nueva normalidad” tras la pandemia en un 40% de las organizaciones, según un estudio de Garter.

En este nuevo entorno de trabajo, construir las habilidades Network IQ tanto de los miembros individuales de los equipos como de los equipos es clave. Nuestro estudio muestra que a través del talento de nuestros programas de innovación hemos podido no solo el paquete de habilidades digitales que son parte del proceso de evaluación de Network IQ sino también de generar más credibilidad y un cambio de mentalidad, de manera que la gente pueda trabajar a través de silos y crear nuevos acuerdos en la misma organización y también con compañeros que puedan estar conectados a su ecosistema.

¿Puedes hablarnos de los proyectos de innovación que se están desarrollando en la Unión Europea?

Existen un basto número de diferentes proyectos de innovación desarrollados en la Unión Europea. Algunos tienen más impacto que otros. Bajo muy punto de vista, algunos de los potenciales avances que surgirán en el futuro estarán conectados con proyectos del cerebro humano, computación cuántica e inteligencia artificial.

La gente no sabe que el I+D de la Unión Europea tiene uno de los programas de inversión más grandes del mundo. Están pensados para 7 años y el último presupuesto fue de 77 billones de euros. En 2021 empieza un nuevo programa de financiamiento llamado Horizon Europe. Este es el más grande hasta la fecha con 95,5 billones de euros.

No obstante, no solo el tamaño de la inversión importa cuando hablamos de I+D. También es sobre qué financia, cuáles son las prioridades, cómo se organizan las colaboraciones de investigación, y cuál es la capacidad en la economía y en la sociedad para absorber los nuevos avances.

Pongamos el foco en uno de los proyectos específicos de la Unión Europea que ha generado un profundo impacto hoy en día. Con 100 millones de euros, la Unión Europea ha desarrollado el “arn mensajero”, una técnica que está detrás de la vacuna para el Covid-19 BioNTech de Pfizer. Ahora que la vacunación empieza en los estados miembros de la Unión Europea deberíamos saber que esto es posible gracias a Europa ya que ninguno de los estados podría haber desarrollado una vacuna de manera individual en un período de tiempo tan corto.

¿Qué tipo de cosas, como el hombre en la luna, veremos en el futuro?

La misión Apolo que puso a Armstrong y Aldrin en la luna y luego los devolvió sanos y salvos fue un hito sin precedentes del ingeniero humano y el desarrollo tecnológico. Ahora somos testigos de la carrera especial desarrollada por el visionario Elon Musk y SpaceX en colaboración con NASA, así como la enorme inversión de I+D en China. Como en el pasado, el pensamiento de ‘el hombre en la luna’ fue parte de una competición política global. Si se corta el programa de financiación de la NASA, está claro quién ganará esta vez.

Sin embargo, tenemos un ejemplo muy bonito de este pensamiento enfocado en la gente, en el planeta y la prosperidad en Europa.

En los últimos años he trabajado con un grupo de expertos incluyendo a la profesora Mariana Mazzucato, para el Comisariado de la Unión Europea Carlos Moedas en la política orientada a una misión. Este trabajo ha llevado a nuevas estrategias de financiación para cinco misiones – una larga colaboración de investigación e innovación entre socios que tienen un mismo objetivo y ambición – con gran ambición por el éxito.

Por ejemplo, uno de ellos es una misión sobre ciudades. La financiación de la Unión Europea ayudará a 100 ciudades a convertirse en climáticamente neutrales para 2030. Estamos hablando de solo 10 años. Encuentro que este ejemplo es sorprendente porque soy consciente de lo complicado que es movilizar a los accionistas del sector público y el privado, ganarse el apoyo de los ciudadanos y hacer que este sistema de transformación a gran escala funcione. Otras misiones europeas están relacionadas con el cáncer, océanos sin plásticos, cambio climático y transformación social, la salud de la tierra y la comida.

¿Cuáles son los retos a los que tendrán que enfrentarse las empresas por la innovación?

Estamos siendo testigos de una disrupción total de las cadenas de valor globales. Una crisis así ofrece muchas oportunidades para la mayoría de negocios emprendedores. Veo que hay tres principales retos que las empresas van a enfrentar: talento, estrategia, y la propia innovación. Paso a elaborar.

El nuevo entorno de trabajo totalmente digital requiere de nuevas habilidades digitales. No estamos de usar Teams, Zoom o Slack. Hablamos de cambiar la manera de pensar de análogo a digital. Y es este reto a nivel personal y de equipo cuando la gente realmente pasa de trabajar con una jerarquía escrita en papel para pasar a trabajar en mayor medida como una red social. No todo el mundo tiene la capacidad de trabajar en una estructura interconectada y en constante comunicación.

En términos de estrategia es la redefinición de la cadena de valor y construir nuevos acuerdos. Pero en muchos casos es una cuestión de buena planificación financiera, y en última instancia, de supervivencia. Estoy segura de que seremos testigos de mucha actividad de fusiones y adquisiciones. Muchas pequeñas firmas serán compradas si no entienden rápidamente el nuevo comportamiento del consumidor y desarrollar modelos de negocio basados en redes.

Finalmente, cuando hablamos de innovación, veo que muchas grandes organizaciones no son muy emprendedoras. Innovar no es solo invertir en I+D, algo muy importante. La innovación también habla de la cultura emprendedor y aquí volvemos al tema de la cuestión del talento de las habilidades. El factor humano es el mayor reto que las compañías enfrentarán debido a la innovación, porque, tal y como dijimos en el principio: la tecnología es un bonito juguete, pero la innovación está relacionada con las personas.